Prepararte para el divorcio o separación
Prepararte para el divorcio o separación sólo supone adquirir confianza, seguridad y auténtica capacidad de acción. Y, al final, puedes elegir divorciarte o no. Pero lo DECIDIRÁS TÚ, no las circunstancias, no los demás, sólo tú.
Cuando me divorcié, entendí porque hay parejas que, por mal que se lleven y sufrimiento que se causen, no se separan nunca.
Es la decisión más dura que puede tomar una persona.
Pero creo que se minimiza, es una de esas cuestiones, como tener hijos, que el entorno hace asequible con los recursos normales y, si has tenido hijos, estarás conmigo que hay cosas que nunca nos contaron.
Con el divorcio pasa algo parecido, hay tantas películas, hay tanta normalización, que cuando te pasa a ti y sientes que es “imposible” te sientes sola y desamparada.
Pero lo que te está pasando nos ha pasado a casi todas.
Más allá de que tu entorno sea comprensivo y compasivo, y muchas veces los amigos y familia endurecen la situación, tomar la decisión es como dar un paso hacia el abismo.
Por eso, no debes precipitarte si no te sientes preparada y fuerte. No hay “nada que debas hacer” sólo tú puedes manejar los tiempos, porque, en mi experiencia, los hombres no suelen dar el paso, te hablo del 99% de los divorcios que conozco por mi experiencia profesional y en mi entorno personal, y eso es una ventaja: tú decides.
- Si sientes que se acabó tu pareja porque te has enterado que tu marido tiene otra relación, no te precipites ¿Quién ha dicho que te debas separar deprisa y corriendo? Prepárate.
- Si lleva años ignorándote ¿puedes esperar un poco más para prepararte adecuadamente?
- Si tras meses de falta de respeto has tomado la decisión ¿Llegó la gota que colmó el vaso o vas a recuperar tu autoestima haciendo lo mejor para ti?
- Si hace tiempo que ya no le quieres como debes de querer a una pareja, incluso tienes otra pareja y la culpa te roe por dentro ¿Vas a renunciar a tus derechos para “pagar” esa culpa?
- …
Estos son algunos ejemplos de situaciones durísimas que llevan a tomar la decisión de terminar un matrimonio o pareja, situaciones que suelen ser largas en el tiempo y que van minando la confianza, la seguridad y la autoestima.
Por eso, iniciar un proceso de divorcio desde una posición frágil no es la mejor alternativa. La mejor estrategia es que te prepares, porque:
- Prepararte no significa divorciarte.
- Conocer tu situación económica, no es engañar.
- Hablar de como te sientes, llevar un registro de las situaciones dolorosas no es desleal.
- Valorar todas las opciones y elegir la que más te conviene en cada momento no es egoísta, ES INTELIGENTE.
Y cuanto mejor te prepares, mejor será para todos, para tus hijos, si los tienes, pero para tu pareja también.
Sí, porque lo inteligente es transformar la situación actual en una nueva, donde si hay hijos se cree una nueva familia, si no los hay, cada uno siga adelante con la mayor paz posible.
Cerrar bien las heridas evita que en el futuro se infecten.
Por eso consúltame, pide una sesión conmigo y valorarás de primera mano lo mejor para ti y tu familia.